Porque bailo descalza con el orgullo de mi raza, porque recibo las estaciones con el asombro de los niños. Porque mi alma es clara hoy y mi corazón late por lo que amo. Porque me la juego en sueños que no son míos, y por los míos levanto el polvo de los caminos. Porque me paro a ver nubes en los charcos, nunca mi rostro, esa no soy yo! Lo que soy está dentro, desprende chispas en la nieve y para los vientos del norte. Porque tú me ves sin yo creer enseñar nada, pero mi alma se asoma a buscar cantos a través de mis manos y mi voz te acuna, y te transmite paz. Y yo me lleno de alegría cuando me traes flores comunes, porque no soy común para gustar de rosas como todas las mujeres. Porque quitas los pétalos de las margaritas para tener el misterio de si me amas entre tus manos. Guardas pétalos de amapolas rojas para entregarme en otoño el color de la esperanza. Porque nada pregunto acaso que no quieras tú contarme. Tal vez por algo de esto es que me amas, pero yo creo firmemente, que es por salir corriendo descalza y cantar en la madrugada sin el falso miedo de no saber hacer nada de ello. Pero soy libre, y la libertad de amarte, te desvela dándole vueltas a qué vi en tus paso cansados. Pero muchas veces te lo dije, porque guardas el universo en tu mirada, y yo, amo las estrellas porque son parte de mi alma. y si te escucho, no lo dudes, lo hago, veo un firmamento lleno de muchas estrellas que danzan como yo. Y si te miro, que también lo hago, el corazón da saltitos en busca de sus sueños:
Me voy. -A dónde? dijo la noche. No tiene importancia -Subiré las montañas y cuando encuentre a lobo me tenderé sobre su cuerpo.-No tiene sentido, comentó el arroyo. -Lo tiene, contestó la luna.- lo ama, la ama, no hay mejor lugar para reposar sus sueños.- Así es, dijo ella feliz, y se fue a saltitos en busca de sus sueños.
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