MARIPOSAS MUERTAS
(Autor: Cristian Micó Ebro)
Entré en su corazón sin su permiso,...
robé todos los muebles del salón,
la fe, la duda, el miedo, el destino,
los azulejos rotos del colchón,
las veces que la quise y no me quiso,
las promesas que me hizo
pintadas al carbón,
las borracheras y el color del vino,
las mariposas muertas
pidiéndome perdón.
La culpa es de los dos y de ninguno,
el llanto y el rencor, a repartir,
el techo con goteras, todo tuyo,
la mala suerte déjamela a mí,
los besos y los versos son del mundo,
me llevo los dibujos
con lápiz de carmín,
tú quédate los sueños con seguro,
las mariposas muertas
volando en el jardín.
La libertad sin alas te la cedo,
y los espejos de la habitación
que vieron cómo se amaron dos cuerpos,
maldita sea... adictos al dolor
entre las sábanas de los deseos
de terciopelo negro
con manchas de sudor,
también te presto el polvo del ropero
y las mariposas muertas
cantando esta canción.
robé todos los muebles del salón,
la fe, la duda, el miedo, el destino,
los azulejos rotos del colchón,
las veces que la quise y no me quiso,
las promesas que me hizo
pintadas al carbón,
las borracheras y el color del vino,
las mariposas muertas
pidiéndome perdón.
La culpa es de los dos y de ninguno,
el llanto y el rencor, a repartir,
el techo con goteras, todo tuyo,
la mala suerte déjamela a mí,
los besos y los versos son del mundo,
me llevo los dibujos
con lápiz de carmín,
tú quédate los sueños con seguro,
las mariposas muertas
volando en el jardín.
La libertad sin alas te la cedo,
y los espejos de la habitación
que vieron cómo se amaron dos cuerpos,
maldita sea... adictos al dolor
entre las sábanas de los deseos
de terciopelo negro
con manchas de sudor,
también te presto el polvo del ropero
y las mariposas muertas
cantando esta canción.
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