domingo, 5 de abril de 2015

No puedo alcanzarte




No puedo alcanzarte
al otro lado del precipicio.
Sé que le piensas...

quiero creer que él te piensa,
ese que no sabe el color de tu mirada.
Si hubiera visto tus ojos
cuando le nombras
brillantes, como yo los vi.
Si supiera que le sueñas cada noche
me dices que antes de despertarte.
Ese sueño en que lo abrazas de espaldas.
Y yo veo tu sonrisa,
no te dejo caerte,
no te dejo irte al otro lado de ese puente
tengo miedo de que no regreses.
Qué sabe el de lo que tú sientes.
Que no te duelan sus palabras
no sus silencios,
nadie que te haya visto podría dejar de amarte.
Ese que no sabe que ríe en tus sueños,
vuelve tú, la verdadera
la que eras siempre,
la que amaba.
Vuelve a sentir por todos nosotros
el amor que te abrasaba
no dejes que él sople y lo apague,
no puede desearte mal alguno
si te ha amado.
Necesitamos tus palabras y tus carcajadas,
que no finjas,
que seas tú aquella que caminaba descalza por la luna.
Vente arriba, vente a ti!
de nuevo tú, la que al andar danza.
deja que diga a gritos que no eres amada,
que sabe del amor quien así habla
Me dijiste y recuerdo, nunca lo olvido,
porque tus ojos, tus ojos,
eran sinceros:
si se hubiera ido,
me habría dormido con él aunque no me llevara
este mundo sin su presencia, ahora que le sé
no vale nada.
Te habrías marchado,
dejado aquí solo, a mi
a todos cuantos te aman.
Deja que te tienda la mano,
deja que te alcance
que por mí te salve!
 

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